Kung Fu Panda 4 (reseña)

Por Rubén Peralta | De hecho, Po se ha sentido cómodo con su existencia como guerrero dragón. Cuando no se embarca en grandes aventuras, aprovecha su popularidad para hacer un poco de publicidad para la tienda de fideos de su padre. Al maestro Shifu no le gusta mucho esto último y culpa a Po por su falta de seriedad. Más aún porque ha llegado el momento de que el panda piense en su sucesor. No quiere saber nada de eso; no tiene planes de convertirse en un líder espiritual, como Shifu le exige. Pronto tendrá que preocuparse por cosas completamente diferentes, porque el camaleón mágico está tramando travesuras. Junto con la zorra ladrona Zhen, se propone detener al temido villano y demostrar que todavía es un guerrero y debe seguir siendo.

El año pasado fue un año difícil para DreamWorks Animation, como la mayoría de los principales estudios de animación. Los resultados de taquilla de Trolls: Strong Together se mantuvieron por debajo de las expectativas; la franquicia anteriormente era más fuerte. El desarrollo interno de Ruby incluso salió completamente mal. Ahora se supone que otro viejo conocido le llevará de nuevo por el camino del éxito. Las tres películas de Kung Fu Panda  juntas recaudaron más de 1.800 millones de dólares estadounidenses. También hay varias series y otras formas de cadena de marketing, que hacen de las historias sobre el guerrero ligeramente diferente una de las franquicias más conocidas del estudio. Así que ahora una cuarta parte pretende continuar con esta historia de éxito. Podrían seguir más, al menos la gente ya está pensando en ello.

Para que esto funcione no se corren grandes riesgos. Se presenta una nueva protagonista, la zorra Zhen, que causa mucha emoción y también reemplaza a los Cinco Furiosos, a quienes sólo se menciona brevemente de pasada. Y en realidad el tema es romper con el pasado y atreverse a hacer algo nuevo. Pero eso no cuenta para la película en sí. Kung Fu Panda 4  incluye un montón de chistes que te harán sentir como si los hubieras visto antes. La pelea final también fue una gran decepción. Después de haber establecido previamente que el camaleón es el peligro más grande y versátil, nos contentamos con desempaquetar las cosas viejas nuevamente. La final terminó bastante rápido, por lo que podríamos haber esperado más.

El viaje hasta allí es divertido y los demás personajes también desempeñan un papel importante en él. Entre ellos se encuentran, por ejemplo, los animales del inframundo, que desempeñan un papel más importante a lo largo de la historia. Lo mismo se aplica a los dos padres, que son todo menos héroes, pero que también se embarcan en una aventura por el bien de su hijo. Estos personajes no se utilizan correctamente y, en última instancia, la película no alcanza su potencial. Pero les debemos algunos momentos divertidos. Esto es bueno para Kung Fu Panda 4 porque la historia depende menos del protagonista, que realmente no se ha desarrollado más. El hecho de que los numerosos personajes se unan crea mucha dinámica.

En la serie “Kung Fu Panda”, no sólo siempre ha habido mucha acción, sino que también siempre ha habido un contrapeso emocional a toda la acción. En particular, el concepto de familia fue tratado en sus más diversas formas. El inicio de la serie dejó claro que los lazos de sangre no tienen por qué ser un sello de calidad en el cuidado, sino que un padre ganso también puede amar y apoyar a su hijo osito adoptado. Después de que el padre biológico de Po apareciera por primera vez en «Kung Fu Panda 3», la relación padre-padre-hijo adquiere ahora su propia dinámica, incluso en «Kung Fu Panda 4» se pueden percibir algunos matices extraños, que son agradablemente tranquilos. integrado en la historia.

Noodle goose Ping ( James Hong ) y el padre oso Li ( Bryan Cranston ) se preocupan tanto por su descendencia que parten juntos para apoyar a su amado Po en su lucha contra el desagradable cambiaformas, lo que lleva a momentos realmente conmovedores para el dúo de padres duales. La película incluso responde a la pregunta de quién es el «verdadero» padre de Po de una manera fundamentalmente comprensiva y lo deja inequívocamente claro: no importa si es un padre panda o un padre ganso, lo único que importa es tu propio padre. apoyar plenamente al niño en las fases difíciles de la vida. Y cuando se trata de eso, Ping y Li realmente son los padres del año en pantalla.

Otro punto a destacar son las localizaciones: Po es atraído desde el Valle de la Paz hacia el gran mundo, y los diferentes decorados no sólo tienen mucho que ofrecer visualmente, sino también mucha variedad. Junto con Po, el público no sólo explora la megametrópolis, sino también el escondite subterráneo del gremio de ladrones, poblado por todo tipo de (adorables) personajes extraños. Algunas de las nuevas ciudades parecen pequeñas imágenes de objetos ocultos, así de ocupado está aquí. Los fanáticos de los Monty Python también pueden esperar una cariñosa alusión a uno de los personajes de terror más grandes de » Los Caballeros del Coco «, porque el conejo asesino sediento de sangre probablemente ya tuvo descendencia, y ahora están causando muchas turbulencias en la casa de los ladrones. gremio.

Hablando de turbulencia: la acción también vuelve a ser muy divertida. 

Los trepidantes interludios de artes marciales realmente aceleran el ritmo y, al mismo tiempo, están bellamente y caóticamente coreografiados. En un bar rústico, por ejemplo, hay una pelea encarnizada con algunos personajes extremadamente turbios, mientras que un escape salvaje de la ley conduce a una versión instrumental de «Kung Fu Panda» del clásico de Ozzy Osbourne «Crazy Train» a una diversión tremendamente divertida. Un paseo por las estrechas calles de Juniper City se nos va de las manos.

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