La actriz Scarlett Johansson ha demandado a una aplicación de IA por usar su imagen y voz en un anuncio sin su permiso. Este caso es un ejemplo de cómo los avances tecnológicos pueden plantear nuevos desafíos legales.
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El anuncio, de 22 segundos, mostraba un fragmento real de Johansson en un clip detrás de escena de Black Widow, diciendo: «¿Qué pasa chicos? Soy Scarlett y quiero que vengas conmigo…». Luego transicionaba a fotos generadas por IA y una versión clonada de su voz promocionando la aplicación de IA. Bajo el anuncio, había un texto pequeño que decía: «Imágenes producidas por Lisa AI. No tienen nada que ver con esta persona».
«Scarlett está manejando la situación en términos legales», dijo su abogado, Kevin Yorn. «No tomamos estas cosas a la ligera. Seguiremos el curso habitual de acción en estas circunstancias y nos ocuparemos de ello con todos los recursos legales que tengamos», añadió.
Johansson es una de las caras (y voces) más conocidas de Hollywood y es la portavoz de empresas de alta gama como Dolce & Gabbana y Louis Vuitton. Teniendo esto en cuenta, resulta difícil creer que alguien se atreva a copiar su imagen, si la afirmación es precisa.
La idea de utilizar la IA para copiar las imágenes de celebridades es un fenómeno relativamente nuevo, por lo que las implicaciones legales aún están siendo discutidas. En un incidente notable, el actor Tom Hanks advirtió a sus seguidores en las redes sociales que se estaban utilizando videos con versiones de IA de su imagen para vender fraudulentamente productos.
En el caso de Johansson, ella está alegando que la aplicación de IA violó su derecho a la privacidad y su derecho a la imagen. El derecho a la privacidad protege a las personas de la recopilación o uso no autorizado de su información personal. El derecho a la imagen protege a las personas del uso no autorizado de su imagen o voz.
La demanda de Johansson podría tener implicaciones importantes para la industria de la IA. Si la demanda prospera, podría establecer un precedente para que otras celebridades demanden a las empresas que utilizan IA para copiar sus imágenes o voces sin su permiso.
Esta demanda es un ejemplo de cómo los avances tecnológicos pueden plantear nuevos desafíos legales. A medida que la IA se desarrolla, es probable que veamos más casos como este. Es importante que los legisladores y los tribunales estén preparados para abordar estos desafíos y proteger los derechos de las personas.
Además del caso de Johansson, hay otros ejemplos de uso no autorizado de imágenes o voces de celebridades. Por ejemplo, en 2022, la cantante Billie Eilish demandó a una empresa de moda por usar su imagen sin su permiso en una campaña publicitaria. En 2021, el actor Tom Cruise demandó a una compañía de videojuegos por usar su imagen en un juego sin su permiso.
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Autor:
DUPAO pop
